Cumplen la misión: finales de 2025
Nuestra asignación "oficial" es ayudar a los Jóvenes Adultos aquí en las Islas Baleares. Vivimos en Palma de Mallorca y en nuestra capilla se reúnen tres barrios. Tenemos reuniones todos los viernes por la noche en la Iglesia, y a veces también en nuestro piso. Hacemos compras, preparamos comidas y asistimos a actividades, que son organizadas por los propios Jóvenes. Nosotros solo estamos ahí para aconsejarles. Empezaremos una clase de preparación misional pronto, y estará disponible por zoom para otros jóvenes adultos que viven fuera de Palma y en las otras islas.
Apoyamos a los jóvenes misioneros con charlas, transporte, comidas, llaves perdidas e inspecciones de pisos. Ayudamos a comprar cosas necesarias para sus pisos (como aspiradoras), y los mantenemos abastecidos con Libros de Mormón y panfletos. También velamos por ellos y sus necesidades emocionales y espirituales.
El Élder Reid tiene un amplio conocimiento sobre las escrituras, los discursos de las conferencias y la historia de la Iglesia, tanto en inglés como en español. Es a quien siempre recurren para los discursos de la sacramental de último minuto. Su participación en discusiones misionales es influyente. Él bautiza, confirma, da bendiciones del Sacerdocio, toca el piano en las reuniones sacramentales, etc.
El lema misional de la Hermana Reid es: "Si se lo cocinas, vendrán." Nos gusta invitar a varias personas a nuestro piso, entre ellos parejas y familias, para que puedan conectar y apoyarse los unos a los otros. La Hermana Reid hornea cookies y las compartimos con los demás. Prepara comidas para los misioneros, para festividades, conferencias de zona, y lo más importante, cuando traen investigadores (ahora llamados amigos) a nuestro apartamento para cenar. ¡También estudia español!
Visitamos hospitales, incluida una hermana de Estados Unidos, que tuvo un accidente de bici grave, y la visitamos casi a diario por seis semanas. También visitamos miembros menos activos y miembros que no pueden salir de casa. Fuimos bendecidos al poder visitar a una hermana de 90 años, quien fue la primera persona en ser bautizada en Mallorca, hace más de 45 años.
Recorremos diariamente la ciudad y hablamos con la gente sobre la Iglesia, lo que estamos haciendo aquí y les damos tarjetas con nuestra información. La Hermana Reid cocina, el Élder Reid friega los platos, y hace visitas frecuentes de último minuto al supermercado. En las charlas misionales, el Élder Reid enseña doctrina, y la Hermana Reid comparte su testimonio entre lágrimas.
A pesar de nuestras buenas intenciones, tenemos desafíos. Cometemos muchos errores, tenemos desacuerdos, olvidamos algunos detalles y dudamos de nosotros mismos. Ocasionalmente nos quedamos dormidos o dormimos la siesta (intentamos que no sea en el mismo día o mientras conducimos). Comemos demasiado pan y chocolate, y no suficiente pescado.
Oramos y hacemos lo que el espíritu nos indica. Pero lo más importante de todo es que nos preguntamos cómo hemos sido tan bendecidos de poder servir aquí en Mallorca. Amamos a estas maravillosas personas a las que servimos, y estamos aquí para ayudar en el recogimiento de Israel, trayendo almas de una en una.
Fotos: Los Reids y Hermana Heckmann